Cómo recuperarse de un divorcio o
una ruptura amorosa.



Recuperarse de un divorcio o de una ruptura amorosa puede ser difícil, porque es doloroso, pero nuestra actitud y esfuerzo es determinante.



¿Sufres porque tu pareja ya no está contigo?

Aprende a sanar tu corazón.



"Querer a alguien que no te quiere es como intentar volar con una ala rota".(Autor desconocido)





Esta sección te ayuda a:

1.- Conocer el principio de la recuperación.
2.- Saber que puedes hacer.







El principio de la recuperación.


Si estás viviendo un divorcio o una ruptura amorosa, muy probablemente,  estás sufriendo ya que, generalmente, en estas situaciones, el dolor y la tristeza están siempre presentes.

Por otro lado, este tipo de situaciones involucra emociones negativas, tanto hacia nuestra expareja, como hacia nosotros mismos.  Constantemente nos vemos agobiados por sentimientos como el coraje, que pueden  estar dirigidos hacia ambos, culpa, resentimientos e incluso dudas, sobre todo si fuimos nosotros quienes decidimos romper con la relación.

Cuando nos preguntamos cómo recuperarnos de un divorcio o ruptura amorosa, debemos tener en cuenta que se requiere de cierto tiempo y de tomar una actitud activa, es decir, debemos estar conscientes de que no podemos cruzarnos de brazos y esperar a que pase el tiempo para que el dolor desaparezca de un día para otro, por sí solo. Nuestra actitud y nuestra conducta son determinantes en nuestra recuperación.

Sin embargo, dado lo difícil de la situación y de tu propia situación emocional, es importante que no tomes una actitud perfeccionista, ni para juzgar lo que hiciste ni para juzgar cómo tiene que ser tu comportamiento actual, cada momento.

Recuerda que todos los seres humanos cometemos errores y los vamos a seguir cometiendo a lo largo de toda la vida, porque somos seres falibles, pero lo importante es aprender de ellos y corregir siempre que sea posible o tratar de no volverlos a repetir. Por lo tanto, cuando no actúes como quisieras o como piensas que "deberías" haberlo hecho, no te regañes o ataques, simplemente analiza qué sucedió, por qué actuaste como lo hiciste y que puedes hacer la próxima vez-

Sentirte culpable, regañarte o exigirte demasiado no te va a llevar a ningún lado, solamente te va a impedir actuar adecuadamente y te va a hacer sufrir. Al analiza lo que sucedió y lo que estás viviendo, vas a poder descubrir lo que puedes aprender de ello.


Regresar al índice.




¿Qué puedes hacer?

A continuación vamos a ver algunas  sugerencias que te van a ayudar a sobreponerte con mayor rapidez.

1.- Mantente lo más alejado que puedas de tu ex pareja. Si no hay niños de por medio no la veas ni hables con ella para nada. Esto es con el fin de que puedas romper más fácilmente el lazo emocional y la dependencia que los une y porque cuando pones suficiente distancia y tiempo puedes ver a la persona y a la situación como realmente son, con mayor objetividad y con menos posibilidad de querer recuperar una relación que ya no funciona.


2.- Cuando empieces a salir nuevamente con otras posibles parejas, no las compares con tu ex pareja para ver si son mejores o peores. Olvídate de él o de ella y simplemente pregúntate si la persona con la que estás saliendo te gusta o no, si crees que te puede dar lo que tú deseas y necesitas en estos momentos y en un futuro y si comparten los mismos valores.

Si a todas las personas con las que existe la posibilidad de salir o de establecer una relación les encuentras un defecto o un motivo para negarte a estar con ellas y ya ha pasado un tiempo razonable como para haber elaborado por lo menos parte del duelo, pregúntate si no te está deteniendo el miedo a sufrir un nuevo rechazo. Si es así, es importante que estés consciente que no porque te haya sucedido 1 o 2 veces quiere decir que te va a suceder siempre. Vale la pena que te arriesgues.

Pero por el otro lado, no busques desesperadamente encontrar de inmediato una relación que te ayude a sentirte mejor, si no has trabajado un poco sobre tu pérdida y las emociones que ésta te provocó, así como lo que pudiste haber aprendido de ella.


3.- Busca actividades que te hagan reír. Ve películas cómicas, lee chistes, visita amigos que sean graciosos, recuerda momentos chistosos que hayas vivido o visto, etc. La risa tiene efectos maravillosos tanto a nivel físico como emocional.

 

4.- Ayuda a personas que tienen un problema o que están pasando por un mal momento. La mejor forma de olvidarnos un poco de nosotros mismos y de nuestro dolor, es ayudando a otras personas. Esto nos ayuda, además, a darnos cuenta de que nuestros problemas no son únicos ni tan terribles, a mejorar nuestra autoestima y abrirnos emocionalmente para dar y recibir el afecto que en ese momento nos hace tanto bien.


5.- Cuando empieces a pensar en tu ex pareja, a recordar situaciones que te hagan sentir mal o simplemente a tener pensamientos negativos como “nunca voy a encontrar a alguien que realmente me quiera”, “yo no tengo suerte en el amor”, etc., ponte a hacer algo que te entretenga y que no te permita seguir pensando en ello.

Recuerda que, aunque en un principio te cueste trabajo, tú decides  hacia dónde quieres dirigir tus pensamientos. Si te pones a hacer algo que requiera de toda tu atención o si te pones a cantar, vas a dejar de pensar en tu ex pareja.


6.- Evita tener, en lo posible, aquellas cosas que fueron especialmente importantes para ustedes dos y que, por lo tanto, son un recordatorio constante de él o de ella. Tampoco escuches, por elección, la música que te recuerde a tu expareja o a la relación.

 

7.- Cada vez que te sientas bien, aunque sea por unos minutos, anótalo, para que cuando te sientas mal puedas comprobar que no todo el tiempo te sientes así. Generalmente cuando estamos tristes, enojados, dolidos, etc., creemos que todo el tiempo estamos sufriendo y no es así, también tenemos buenos momentos y lo importante es que los buenos duren cada vez más tiempo y los malos vayan disminuyendo.

 

8.-Trata de sonreír lo más que puedas. Inicia tu día sonriéndote en el espejo. Pon en tu cara una gran sonrisa, aunque ésta sea forzada. Sonríele a la gente que veas o con la que hables.

 

9.- Imagínate el futuro que deseas y sueña despierto con él, pero sin que tu ex pareja aparezca en él. Visualiza los diferentes aspectos de tu vida, trabajo, familia, relaciones, etc., tal y como te gustaría que fueran y trata de verlos con la mayor cantidad de detalles posibles. Hazlo con frecuencia y después escribe tus metas y los pasos que necesitas dar para lograrlas. Recuerda que si no tenemos metas claras es difícil que tengamos la motivación suficiente para lograr lo que deseamos.

Recuperarse de un divorcio o de una ruptura amorosa requiere de vivir y trabajar el duelo por la pérdida que hemos vivido.




Psic. Silvia Russek.
Lic. en Psicología Clinica.
Especialidad en Terapia de Pareja.
Especialidad en Terapia Cognitiva.
Terapia por Internet. por videoconferencia.
Citas:
e-mail: [email protected]




¿Sobre qué temas te gustaría leer?
Tu e-mail no queda registrado, por lo que no vas a recibir respuesta.



¿Puedes calificar este artículo, por favor? 
Tu e-mail no queda registrado, por lo que no vas a recibir respuesta.




Recuerda:

El camino al éxito, está formado por información, acción y perseverancia.
Cada paso, por pequeño que sea, te acerca a la meta.

Tú puedes lograrlo.

Silvia Russek.